lunes, 4 de junio de 2012

Disociado

Desperté junto al frío amanecer
y desde la ventana miré al exterior,
estaba mi mente allá afuera derramada,
toda en forma de niebla
formaba un denso nubarrón.

Ya no se cuantas veces
he mandado
al carajo
mi vida hoy.
Hay una bala
camino directo a mi cabeza,
no se cuando irá a llegar,
lo más probable
y me tome por sorpresa.

La melodía resulta prescindible
si no hay nada nuevo
ni estúpido que decir.

Escribí mi nombre sobre el agua,
pero lo vi luego desaparecer.

Cuando mires entre las cenizas busca bien.